18 enero 2014

Formación de enero: La Iglesia

El tema de reflexión de este mes de enero ha sido la Iglesia, nuestra pertenencia a la Iglesia, nuestro amor a la Iglesia, nuestra vivencia de la fe en la Iglesia, nuestra necesidad de estar en comunión con la Iglesia…

Ha sido una exposición muy sencilla y profunda. Nos ha expuesto la formación el Párroco de Montellano, D. Florencio Fernández Delgado.

Nuestro Párroco, nos pide que profundicemos de manera individual sobre el tema de la Iglesia y después lo hagamos cada uno en nuestro grupo. Si alguien no está en ningún grupo también es invitado a reflexionar. Los puntos a reflexionar es el siguiente texto. Las conclusiones se expondrán por escrito y se le harán llegar al Párroco para poder elaborar un plan de Evangelización Parroquial. El plazo de trabajo son dos semanas.


 LA IGLESIA

¿Para qué nace? Para continuar la tarea de anunciar el Evangelio (Buena Noticia) a los hombres, de todos los tiempos, culturas y razas. La Iglesia nace para la Misión, no nace para permanecer dentro del templo parroquial, ni en lo privado de mi vida, nace para ser comunidad misionera ¿nosotros salimos a las calles a llevar a Jesucristo? ¿Por qué?...

Esa tarea se nos ha encomendado a nosotros, y somos nosotros lo que continuamos anunciando el Evangelio. Son muchos los inconvenientes, los contratiempos, las persecuciones… pero nada de ello nos puede hacer desfallecer, porque cumplimos con la misión del Señor. Tengamos presente  que si el Señor nos ha enviado, no nos va dejar solos ni desamparados. El Papa Francisco ha dicho recientemente que no tengamos miedo de salir a las plazas a pregonar el alegre mensaje del Evangelio de Jesucristo.

¿Cómo podemos salir a las plazas de El Coronil, a continuar la tarea de anunciar el Evangelio? ¿Qué ideas se os ocurren para llegar a los alejados que esperan la Palabra de Cristo?  ¿Qué podemos hacer para que nuestra Parroquia sea una parroquia misionera y no una parroquia encerrada dentro de los muros de nuestro templo?

Os invito a que cada uno de vosotros, miembros de la Parroquia, recéis y  pensemos cómo convertir nuestra parroquia en una parroquia que anuncie la alegría de Cristo caminando con nosotros. Y una vez rezado y pensado de manera individual lo recéis y penséis de forma comunitaria. De esta lluvia de idea que surgirán de vuestra oración, comenzaremos a dar los pasos misioneros en este tiempo del Señor.

Podéis leer para la oración Hch 2 y 3.